El genial Thomas Mayne Reid, más conocido como Capitán Mayne Reid, seudónimo con el que firmaba sus obras, nació en Escocia, concretamente en Ballyroney (condado de Down), en 1818. A pesar de que su padre, pastor presbiteriano, teñía reservada la misma carrera para él, el entonces joven Thomas, que no se sentía atraído por la teología, en el año 1838 se embarcó hacia México, desde donde se trasladó a los Estados Unidos. Tras dos años dedicados a la vida de cazador por los territorios indios, en 1840 tomó parte en la expedición de Texas y en 1845 en la guerra contra México como capitán del cuerpo de voluntarios. En 1849, regresó a Europa con el objetivo de combatir contra los húngaros sublevados, pero al arribar a Francia tuvo noticia de que el jefe de los revolucionarios, el general Georgey, había capitulado. Se estableció en Londres, donde se dedicó a la literatura. Murió en Inglaterra, cerca de Ross (condado de Hereford) en 1883.
En sus obras describe el modo de vida de los habitantes de las regiones entonces casi desiertas de la América central y septentrional, utilizando en múltiples ocasiones sus propias vivencias y plasmando las injusticias que se llevaron a cabo con la raza india.
Escritor fecundo, entre sus obras destacan títulos como Los exploradores, Los cazadores de cabelleras, Sendero de guerra, El jefe blanco, El jinete sin cabeza, El bandolero o La cautiva blanca. Pero también abarcó otros temas, como es el caso de esta novela de aventuras, El Halcón pirata, que nos cuenta la trepidante historia de un hombre que es obligado a convertirse en pirata a la fuerza y se enamora perdidamente de una enigmática mujer que forma parte de la tripulación.