¿Qué es la bola?
La bola no es la Revolución; es sólo una forma peyorativa con que
el enemigo llama a la Revolución; como fue peyorativo llamar La
Chinaca a la guerra de Reforma; así como lo fue llamar a la
Revolución Mexicana la bola, la revolufia y otras formas para
negarla y despojarla del carácter de Revolución.
La Revolución se desenvuelve sobre la idea, conmueve a las
naciones, modifica una institución y necesita ciudadanos. La bola no
exige principios ni los tiene jamás; nace y muere en un corto espacio
natural y moral y necesita ignorantes.
La Revolución es hija del progreso, la bola es la hija de la ignorancia
y castigo inevitable de los pueblos atrasados. Ésa es la bola que
pinta con tan sabia mano Emilio Rabasa. Obra de caciques, de
leguleyos, de tránsfugas, de prevaricadores. Medio para enriquecer,
para medrar. Destrucción irreflexiva. Todo para que las cosas
vuelvan a su curso normal